La canción "Delay" interpretada por Guiso es una pieza que invita a reflexionar sobre creencias personales, la vida y el poder de la música en nuestras vidas. A través de sus letras directas y sin rodeos, el protagonista expresa su descreencia en Dios, su falta de amigos y su escepticismo hacia la existencia del más allá. Estos versos iniciales establecen un tono introspectivo y sincero, donde el cantante se abre de manera vulnerable compartiendo sus pensamientos más íntimos.
El verso "Rock and roll" que se repite a lo largo de la canción funciona como un mantra que refuerza la actitud rebelde y liberadora que transmite la música rock. En medio de esa negación del status quo social y religioso, Guiso invita a dejar atrás las lágrimas y unirse a él en un viaje musical. La propuesta de mostrar algo nuevo mediante "dos acordes repetidos" resalta la simplicidad pero efectividad de la música para conectar emocionalmente con el oyente.
La mencionada frase "Yo tengo claro nada es para siempre" añade una capa adicional de filosofía existencial a la canción. A pesar de reconocer que todo es efímero, incluso las canciones que perduran décadas en nuestra memoria, el protagonista encuentra consuelo y sentido en la música rock como una forma de trascender la temporalidad y conectarse con algo más profundo.
Desde una perspectiva emocional e introspectiva, "Delay" parece ser una meditación sobre el paso del tiempo, las creencias personales y el poder transformador de la música en nuestras vidas. La energía cruda y genuina del rock and roll sirve como vehículo para transmitir estas reflexiones con intensidad y autenticidad.
En cuanto al contexto cultural en el que se lanzó la canción en 2011, es interesante observar cómo Guiso se sitúa dentro del panorama musical argentino contemporáneo. Sus letras provocativas y su sonido indie-rock le han valido una base sólida de seguidores dentro del circuito alternativo latinoamericano. El impacto localizado de "Delay" puede haber resonado especialmente entre aquellos que comparten las mismas dudas existenciales o aprecian la honestidad artística expresada a través del rock.
En términos musicales, la estructura básica de acordes repetidos refleja quizás la simplicidad característica del género rock and roll, donde la energía viene más del sentimiento genuino trasmitido que de elaborados arreglos técnicos. Instrumentalmente, se pueden escuchar guitarras distorsionadas y batería dinámica acompañando las vocales directas y sin artificios del protagonista.
En conclusión, "Delay" es mucho más que una simple canción rock: es una declaración personal sobre creencias, efimeridad e inspiración a través de dos simples acordes repetidos. Su sinceridad emocional sumada al poder catártico inherente al rock and roll hacen de esta pieza una experiencia auditiva memorable que invita a reflexionar sobre nuestra propia relación con la vida, el tiempo y la música.