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La mujer del pelotero de Libido

album

La mujer del pelotero (Single)

4 de septiembre de 2025

Significado de La mujer del pelotero

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"La mujer del pelotero" de Libido es una canción que encapsula la desilusión y el añoramiento amoroso a través de una narrativa conmovedora y poética. El grupo peruano, conocido por su estilo alternativo, mezcla rock con influencias pop en este tema, lo que permite sumergir al oyente en la profundidad emocional de la letra.

Desde el inicio, la letra presenta a un protagonista envolvente, cuya historia se entrelaza con las expectativas y decepciones derivadas de un amor no correspondido. Se menciona cómo la mujer que él soñó para amar no se ajusta al ideal que había imaginado. Esta discrepancia entre la fantasía y la realidad establece un tono melancólico desde el principio, reflejando las luchas internas del protagonista. La frase "ella nunca se complicó" sugiere que su amor quizás está atrapado en una idealización donde ella podría ser simplemente un objeto de deseo más que una persona real con sus propias complejidades.

A medida que avanza la letra, emerge una ironía sutil: mientras el protagonista es descrito como "todo un gran soñador", parece ser también víctima de sus propios sueños no realizados. En este sentido, Libido profundiza en temas universales como el amor no correspondido y los miedos inherentes a arriesgarse por sentir algo verdadero. La línea "él que nunca supo perder" resuena en aquellos momentos donde uno debe confrontar sus emociones más íntimas y reconocer quiénes son verdaderamente en las relaciones.

El paso del tiempo se convierte en otro factor crucial dentro del relato. En varias ocasiones se repite la idea de que "la estrella ya se marchó", meticulosamente evoca esa sensación de vacío tras perder a alguien importante. Esto puede interpretarse como una metáfora del impacto emocional duradero que deja alguien cuando decide irse sin mirar atrás. La imagen del sol que "no quiere salir" refuerza esta desesperación y ausencia; simboliza cómo los días pueden sentirse nublados cuando nos invade la tristeza por lo perdido.

La construcción lírica revela cómo el pasado persiste hasta hacerse insoportable; frases como "el tiempo se encargará de borrar / los recuerdos" sugieren tanto esperanza como resignación ante lo inevitable: cada vez será más fácil olvidar esos momentos significativos pero dolorosos. Sin embargo, el hecho de rogar porque aparezca nuevamente ese sol indica un deseo profundo por volver a sentir claridad y felicidad antes experimentada.

El enfoque narrativo adoptado en primera persona proporciona cercanía e intimidad con los sentimientos del protagonista. Su voz resuena nostálgica, permitiéndonos conectar con su lucha emocional al lidiar con su corazón herido tras la partida de su amada. Este recurso genera empatía hacia él; pese a su sufrimiento, logra despojarse de complejidades superfluas para expresar verdades absolutas sobre lo efímero del amor.

Al analizar obras similares dentro del repertorio de Libido o incluso comparándolo con otros artistas latinoamericanos contemporáneos, notamos patrones recurrentes donde el desamor es expuesto como parte esencial del crecimiento personal. Como muchas baladas pop-rock latinas, esta canción toca fibras similares mediante letras sencillas pero cargadas emocionalmente; resonando universales temáticas relacionadas con pérdidas significativas.

En conclusión, "La mujer del pelotero" es mucho más que una simple declaración romántica perdida; es una reflexión profunda sobre las esperanzas humanas frente al fracaso emocional y cómo algunas estrellas brillantes pueden dejarnos oscurecidos tras haber iluminado nuestros corazones. Esta obra artística nos invita a explorar nuestras propias vulnerabilidades mientras recordamos los vínculos perdidos y esperamos nuevas posibilidades bajo ese indiscutible sol deseado.

Interpretación del significado de la letra.

La mujer que él soñó para amar
No era del cuento que imaginó
Ella nunca se complicó
Ella no tuvo el valor de arriesgar

Nunca le dijo que no
Él como todo un gran soñador
Quiso contar una historia de amor
No creyó en el amor

Él que nunca supo perder
Hoy no le quedan las ganas de ayer
Porque ya decidió recoger
Mirada, mirada que hirió el corazón

Ella se fue sin dejarle un adiós
Con las palabras que él regaló
Con la sonrisa que la conquistó
Con todos los besos que en vano entregó

La estrella ya se marchó
Hoy nadie más los puede ver
La noche los abandonó y el Sol no quiere salir
Y el Sol no quiere salir

El tiempo se encargará de borrar
Los recuerdos que la estrella guardó
Ninguno creyó en la luz del Sol
Ni en las caricias que la noche observó

La estrella ya se marchó
Y nadie más los puede ver
La noche los abandonó y el Sol no quiere salir
Y el Sol no quiere salir

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