Beneficios de la música clásica en los niños
En los últimos años se han realizado numerosos estudios científicos que demuestran la importancia que la música tiene para las personas. Hoy conocemos que las notas musicales nos ayudan a regular nuestras emociones propiciando un estado de ánimo positivo e incluso hay temas que fomentan la creatividad o que nos infunden más energía.
Obviamente, los niños no son inmunes a la incidencia de la música. De hecho, se conoce que los pequeños son muy sensibles a los sonidos y, aunque no tengan gustos musicales muy bien definidos, pueden beneficiarse de los efectos positivos de la música.
El efecto de la música en el cerebro
Se conoce que la música y los sonidos en sentido general ayudan a que los pequeños desarrollen sus capacidades cerebrales, lo cual implica que en la adolescencia y la juventud podrían tener más desarrolladas sus habilidades para concentrarse, memorizar y solucionar problemas. ¿Por qué? Simplemente porque el desarrollo del oído no solo implica que escucharemos mejor sino que también potencia la actividad de otras zonas cerebrales vinculadas al procesamiento de los sonidos, las emociones y el lenguaje. En otras palabras, la música es un potentísimo estímulo que potencia el desarrollo cerebral.
Sin embargo, según Alfred Tomatis, un psicólogo francés que lleva años estudiando el lenguaje y la audición, no toda la música es válida, algunos temas ayudan más que otros y esta máxima también se aplica a la música clásica.
En realidad, exponer a los niños a la música clásica con el objetivo de desarrollar su inteligencia es solo un mito popular. No obstante, escucharla al menos durante media hora todos los días potencia un estado en el cual nuestro cerebro se siente más libre para generar nuevas ideas, establecer conexiones neuronales diferentes y, como resultado, optimizaremos el aprendizaje. Es decir, la música clásica no nos hace más inteligentes de por sí sino que fomenta una mayor apertura mental por lo que, si nos esforzamos, es muy probable que logremos resolver los problemas con mayor rapidez y de forma más creativa.
¿Qué tipo de música clásica elegir?
La música barroca es ideal porque tiene un ritmo de 60 golpes que es el equivalente a los latidos del corazón cuando estamos en reposo por lo que propicia una apertura al aprendizaje. Además, como utiliza los tonos más graves, incita las ondas cerebrales vinculadas a la relajación.
Algunos de los temas que puedes ponerle a tu niño son:
Largo de invierno, de Las cuatro estaciones, de Vivaldi
Largo del concierto en re mayor para cuerdas y guitarra, de Vivaldi
Largo del concierto para clavicordio en fa menor Opus 1056, de Bach
Concierto en do mayor para clavicordio y mandolina, de Vivaldi
Muy pero que muy interesante. Sabía de los efectos beneficiosos de la música para el cerebro pero no el porqué y lo de los niños.
Viene muy bien esta información para los padres, la verdad es que la música es muy buena para los pequeños de la casa, además les suele gustar sin problemas y hasta los tranquilizan cuando están cabreados, o al menos eso he experimentado yo.
La música es sumamente importante en nuestro desarrollo también en adultos, y nos puede ayudar mucho para bien en momentos difíciles, por lo menos yo la uso cuando ando frustrado, cabreado o triste y es una manera de canalizar todo lo sufrido.
Gracias por la información.
hola debo decir que me encanta la música clásica y el efecto que produce en los niños y niñas en edad preescolar, soy educadora de párvulos en nivel sala cuna mayor y menor y siempre durante todas las jornadas del día les coloco este tipo de música y mis niños están mucho mas tranquilos y con una capacidad de exploración en las actividades demostrando mayor concentración.