Divinize de Rosalía

La canción "Divinize" de Rosalía, contenida en su álbum "LUX", es una pieza que juega con la dualidad entre el deseo y lo prohibido, entre la sacralidad y la corporeidad. Publicada en 2025, se presenta como un himno contemporáneo que explora temas de devoción, lucha interna y sensualidad desde un enfoque poético y modernista.

La letra abre con una referencia clara al mito de la manzana prohibida: "Fruita roja i rodona / Qui l'endevina? / Obviament és la poma / Que està prohibida." Este recurso no solo establece el tono de transgresión que permea toda la obra, sino que también insinúa un profundo anhelo por lo conocido pero no alcanzado. La figura de la poma se convierte en símbolo del deseo oculto y del riesgo inherente al acto de explorar lo prohibido. Rosalía parece sugerir que incluso si miramos o deseamos sin actuar, estamos a salvo; sin embargo, esta línea se cruza cuando decidimos morder.

El uso del alemán "This ghost's still alive", intercalado con las estrofas en catalán y español, aporta una frescura experimental a la composición. Aquí hay una especie de batalla entre lo vivo y lo muerto: los fantasmas del pasado aún flotan alrededor mientras el protagonismo sigue empujando hacia adelante. Es un reflejo de cómo las experiencias pasadas pueden moldear nuestra identidad presente.

La profundidad emocional se acentúa cuando el protagonista expresa: "Bruise me up, I'll eat all of my pride". Esta línea revela vulnerabilidad; el dolor puede ser aceptado como parte del amor y el deseo genuino. La idea de "divinizar" a alguien sugiere una devoción casi religiosa hacia otro ser, donde el amor trasciende las limitaciones físicas e incluso busca elevar al amado a un estado superior. El protagonismo siente que fue creado para esta utopía espiritual: ser capaz de 'divinizar' implica reconocer la grandeza en lo cotidiano.

A medida que avanzamos por la letra, encontramos referencias a un cuerpo que es tanto objeto como sujeto: "Les línies del seu cos / S'estan desdibuixant." Aquí se observa cómo las fronteras corporales comienzan a disolverse bajo el peso del deseo. Hay una lucha por mantener una identidad mientras se entrega al proceso transformador del amor; además, hay momentos donde parece celebrarse un renacer personal justo cuando muchos crean que ya ha llegado al final.

Ese contraste artístico también está presente en el juego con luces y sombras: “Through my body, you can see the light.” La luz representa tanto revelación como claridad ante los propios demonios internos; lo oscuro está allí pero no es abrumador. Rosalía utiliza esto para desafiar la percepción común sobre fragilidades humanas al convertirlas en fuente de fortaleza.

Musicalmente hablando, "Divinize" amalgama elementos contemporáneos con raíces folclóricas hispánicas en su instrumentalización innovadora. Esto conecta aún más con las obras anteriores de Rosalía, donde siempre ha buscado esa fusión entre tradición y modernidad; cada nota tiene su propio significado además del mensaje lírico.

El año 2025 marca para muchas culturas un regreso a temas introspectivos tras años turbulentos globalmente hablando. Esta canción logra rendir homenaje a esos sufrimientos individuales mientras ofrece esperanza y reivindicación personal. Al enfocar su contenido sensorialmente rico desde diferentes ángulos emocionales e intelectuales, millones pueden encontrar consuelo o resonancia en sus palabras cargadas de significados profundos.

En conclusión, "Divinize" no solo es una exploración del amor sublime envuelto en metáforas divinas; es también un viaje honesto hacia detalles humanos complejos relacionados con vivir plenamente nuestras pasiones junto a sus inevitables sacrificios. En este camino sonoro imaginario dibujado por Rosalía encontramos valentía para enfrentar miedos existenciales mientras nos atrevemos a amar fervorosamente todo aquello que nos compone como seres humanos vibrantes.