Alivio de Rozalén

La canción "Alivio" de Rozalén es una emotiva balada que explora la complejidad de las emociones ante la adversidad y la redención a través del amor. En las letras, se describe una sensación de angustia y agobio, representada por el dolor en los ojos, la opresión en el pecho y la dificultad para respirar. Se habla de situaciones cotidianas que pueden parecer abrumadoras, como el simple acto de levantarse por la mañana o bañarse. Estos elementos visuales reflejan un estado emocional cargado de ansiedad y desesperanza.

A pesar de este panorama sombrío, la canción da un giro cuando se menciona la mirada hacia otra persona, posiblemente un ser amado. En ese momento, todo cobra sentido y surge una sensación de alivio. La presencia de esta persona especial parece ser el motor que impulsa a la protagonista a seguir adelante a pesar de las dificultades. El contraste entre el caos interno descrito en las estrofas iniciales y la calma que trae esa mirada ilustra cómo el amor puede transformar incluso los momentos más oscuros en instantes llenos de significado y esperanza.

La letra también sugiere un anhelo profundo por estar junto a esa persona amada, con referencias a pensar en su ubicación y en lo que pudo haber sido pero nunca será. Esta nostalgia por un futuro alternativo añade capas adicionales de melancolía al tema general de la canción. La necesidad de conexión emocional resuena fuertemente en cada verso, creando una atmósfera íntima y conmovedora.

En cuanto a comparaciones con otras obras de Rozalén, podemos notar similitudes temáticas con sus composiciones anteriores centradas en las relaciones humanas, las emociones universales y la superación personal. Su estilo poético y sincero transciende barreras lingüísticas para conectar con el corazón del oyente.

En resumen, "Alivio" es una canción que encapsula magistralmente el tormento interno contrastado con la liberación emocional proporcionada por el amor verdadero. A través de metáforas visuales vívidas y una narrativa intensamente emotiva, Rozalén nos invita a reflexionar sobre nuestras propias luchas internas y el poder sanador del afecto genuino.

Te duelen los ojos, sientes como se hinchan, toca remar.
Me balanceo en hilos de coser, estoy a punto de caer.
Apuras el café, apartas el diario y te vas...
Agarras calendarios y te mientes
si al romperlo pretendes al tiempo engañar.
Y te levantas, enciendes la luz y te parece que hiere.
Y te bañas y al caer el agua te parece que empapa de más.
No estoy hecha para mi....
Y en cambio,cuando te miro,todo cobra sentido..
Y si vale la pena es por ti...
Me oprimen el pecho, se entrecorta la respiración.
Lamo mi sudor, el mismo que recuerda que sigue latiendo el corazón.
El día es hielo y sin embargo yo logro arder.
Tema al alma por su dictadura y cobardía que rompe al caer.
Y me consumo al pensar en cómo, dónde estarás.
Y me asfixio al pensar en lo que pudo ser y nunca será.
Hasta el silencio se deja oír...
Y en cambio, cuando te miro,
todo cobra sentido...
y si vale la pena es por ti...