La canción "Body count proceed" del artista Suicide Commando es una exploración oscura y visceral de la sociedad contemporánea, cargada de críticas y descontento hacia diferentes aspectos del mundo moderno. A través de letras intensas y provocativas, el protagonista nos sumerge en un universo lleno de odio, dolor, venganza y violencia.
Las primeras estrofas revelan un escenario sombrío donde los síntomas del odio y el sufrimiento son omnipresentes, con enemigos sedientos de venganza y un final fatal con un disparo en la cabeza. La llegada de ángeles se entrelaza con almas abandonando sus cuerpos y seres colapsando ante la violencia, mientras la memoria se borra dejando solo un rastro macabro. La avaricia se manifiesta como un sistema insaciable que lleva a la cuenta de cuerpos sin fin.
El tono crudo continúa con una crítica a una sociedad con los ojos bien abiertos pero ciega ante una enfermedad que la consume desde dentro. La autodestrucción se manifiesta en el poder corruptor que corroe las estructuras sociales, entre mentiras y conspiraciones que revelan una profunda desconfianza hacia la democracia.
A lo largo de la canción, se percibe un rechazo visceral hacia las instituciones establecidas, con una actitud desafiante hacia la manipulación del poder y las estructuras políticas. La letra denuncia abiertamente las falacias detrás del concepto de democracia, cuestionando su eficacia frente a las realidades más oscuras y opresivas.
En términos musicales, "Body count proceed" se enmarca dentro del género dark electro, caracterizado por sus atmósferas densas e inquietantes. Con influencias del EBM (Electronic Body Music) belga, la canción presenta una energía frenética que complementa a la perfección su mensaje provocativo y rebelde. Los sonidos sintetizados contribuyen a crear una ambientación asfixiante que acompaña magistralmente las imágenes violentas evocadas por la letra.
Esta pieza musical lanzada como parte del álbum "Mindstrip" en 2011 sirve como un grito de protesta contra las injusticias y corrupciones presentes en nuestra sociedad actual. A través de sus genios líricos oscuros y provocativos, Suicide Commando invita a reflexionar sobre los peligros inherentes a un mundo dominado por el odio, el poder desmedido y la falta de integridad moral.
En resumen, "Body count proceed" es mucho más que una simple canción; es una declaración incendiaria contra los males contemporáneos que nos rodean, desafiando al oyente a enfrentar los horrores acechantes en nuestro mundo actual. Una obra maestra cargada de crítica social y rebeldía sonora que invita a cuestionar nuestras creencias e indagar en las sombras más profundas de nuestra existencia colectiva.