Guárdame un secreto de Xenon

La letra de la canción "Guárdame un secreto" de Xenon es una profunda expresión de amor y nostalgia, donde el cantante se sumerge en sus recuerdos y sentimientos hacia una persona especial. A lo largo de la canción, se pueden percibir múltiples capas emocionales que van desde la añoranza hasta la resignación, pasando por momentos de melancolía y arrepentimiento.

En los primeros versos, el narrador reconoce su tardanza pero enfoca su atención en un momento estelar, donde las estrellas no se apagan. Esta imagen celestial sirve como contrapunto a su propia percepción personal, donde se siente atrapado en un ciclo eterno de juventud e inmadurez. Subyace aquí un conflicto entre el deseo de recordar buenos tiempos y el peso del presente.

A lo largo de la canción, Xenon expresa su anhelo porque su amada recuerde los días felices compartidos juntos y le ruega que no olvide el amor que una vez compartieron, a pesar de haber seguido adelante con otra persona. Se observa claramente una lucha interna entre los recuerdos gratos y la realidad presente llena de dolor.

La referencia a las fotografías como fuente de melancolía subraya cómo los objetos materiales pueden evocar emociones tan intensas como los abrazos perdidos o las caricias bajo la luz lunar. El narrador demuestra un apego profundo hacia ese ser querido al dedicarle versos y regalos simbólicos cargados de significado sentimental.

Asimismo, se vislumbra un sentimiento persistente en medio del desencanto; el amor sigue latente incluso cuando todo parece perdido. Los tonos tristes evocados por cada nota musical refuerzan esa sensación de vacío que persiste desde que esa persona especial partió.

El tema del arrepentimiento también ocupa un lugar destacado en la letra, reflejando las decisiones pasadas del narrador que aún lo atormentan. La sinceridad y entrega total por parte del cantante son elementos clave que resaltan su naturaleza apasionada e incapaz de renunciar al amor sentido hacia esa persona.

En cuanto a comparaciones con otras obras del artista o artistas similares, podría señalarse una influencia emotiva parecida a la encontrada en canciones románticas hip hop o rap sobre amores perdidos o imposibles. Este tipo de narrativas intimistas reflejan conflictos internos universales relacionados con el dolor emocional y el anhelo persistente por reconectar con alguien especial.

En resumen, "Guárdame un secreto" es una balada romántica repleta de emotividad y nostalgia, donde Xenon transmite con maestría la complejidad del amor pasado a través de metáforas poéticas y introspección personal. La canción invita al oyente a reflexionar sobre sus propios recuerdos dolorosos mientras navega por aguas sentimentales profundas e inexploradas.

Sé que llego tarde, no pasa nada,
esta noche las estrellas no se apagan,
hoy miro al cielo, me veo a mi mismo,
ha pasado mucho tiempo pero sigo siendo un crío.
Espero que te acuerdes de cada tarde,
que recuerdes mi amor como el de nadie,
que no me falles ni me digas que no importo,
que todo fue mejor cuando empezaste con el otro.
Soy consciente o inconsciente si lo pienso,
esclavo del arrepentimiento,
que ya no veo los abrazos que decías,
me jode enamorarme viendo tus fotografías.
Una caricia bajo esta luna media,
parte de tu ser late y se conserva,
si tú supieras todo esto vida mía,
volverías a creer en lo precioso de esos días.
No sé que jode más si verte o recordarte,
cuanto menos diste más pude yo amarte,
dedicándote estos versos y una pulsera vieja
con tu nombre en el reverso.
Pero que más da, ahora que importa,
pasión que brillaba en nuestras dos copas,
cada nota que sonaba dejaba un tono triste,
la vida no me sacia desde que te fuíste.
He comprendido muchas cosas
pero nunca dejé de ser sincero en todos mis tequieros,
y sin dinero hice lo que me pedías,
te traje tus deseos mientras tú dormías.
Nada nos separa más quisiera,
vendería mis heridas si pudiera,
quizás te odie pero no puedo engañarme,
sigo amándote como aquella noche prometí,
el sol está apagado, las nubes lo recubren,
siento cada día como se repite un lunes,
es complicado lo que siento,
las lágrimas infieles ahora escapan por momentos.
Que son solo tonterías me decías,
que yo era tuyo y tu eras mía o eso creía,
la vida nos señala en el espejo,
reflejando cada piedra que lanzamos mar adentro,
por ti, por mí, por los dos, por él, por mi bien, por el tuyo,
or el futuro que siempre juntos habíamos soñado,
no hace falta rimar para decirte que te amo.
Vamonos juntos, dile a el que no comprende,
que el destino ya eligió en aquella noche de noviembre,
vamonos sin nada solo nuestras miradas,
yo te espero, mi luna blanca...