La canción "Fixing to Die" de Bukka White es una blues profunda y emotiva, que encapsula tanto la aceptación de la mortalidad como el dolor y la preocupación que conlleva dejar atrás a los seres queridos. Bukka White, también conocido como Booker T. Washington White, se sumerge en el tema universal de la muerte con una mirada introspectiva y sombría, cargada de emoción.
Desde el primer verso, "I'm looking forward in my eyes and I believe I'm fixing to die," queda claro que White está enfrentando su propia mortalidad. La repetición de la idea de haber nacido para morir es una reflexión sobre lo inevitable del ciclo vital. Sin embargo, aunque reconoce este destino ineludible, lo que más le pesa es dejar a sus hijos llorando. Este sentimiento se magnifica aún más cuando menciona cómo la madre de sus hijos siempre lo trató como si fuese uno más de sus propios hijos, aumentando su deseo de regresar al hogar para morir cerca de ellos.
La noción del sacrificio y del amor paternal atraviesa todo el tema. En los momentos difíciles junto al fuego (“So many nights at the fireside”), se puede imaginar a White reflexionando sobre su vida y las decisiones que tomó, mientras su pareja lamenta su partida. Aquí no solo hay un sufrimiento personal sino también un sufrimiento compartido en familia; un retrato conmovedor y auténtico del blues como vehículo para expresar las penas más hondas del alma.
Otro punto significativo es la referencia a la tumba: “Look over yonder on the burying ground / Yonder stands ten thousand and it’s there I’m laying me down”. Aludiendo a un lugar lleno de tumbas en el cementerio, White se prepara para rendirse ante ese mismo destino predestinado desde el nacimiento.
Hay ironía trágica en los versos finales cuando insta a que lleven a sus hijos lejos antes que ellos tengan que enfrentarse con su tumba (“Mother take my children back before they let me down”). No hay necesidad, dice él, de que griten o lloren sobre el suelo del cementerio—su resignación frente a lo inexcusable sirve solo para intensificar ese agudo dolor paternal.
Comparada con otras obras contemporáneas dentro del género blues clásico, donde los temas recurrentes suelen orbitar alrededor del amor perdido o las dificultades cotidianas afroamericanas durante tiempos difíciles, "Fixing to Die" destaca por sumergirse directamente en meditaciones filosóficas cercanas al final existencial humano complejamente combinadas con ternura familiar explícita haciendo uso mínimo pero eficiente tanto liricamente rítmica instrumentalmente.
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