Con un latido del reloj de Extremoduro

La canción "Con un latido del reloj" interpretada por Extremoduro, perteneciente al álbum "Deltoya", es una pieza musical que explora las complejidades de las relaciones interpersonales y los sentimientos contradictorios que surgen en el proceso. La letra de la canción presenta al protagonista tratando de comprender a su pareja, cuestionándose quién es realmente y qué le preocupa. Se expresa un conflicto emocional a través de metáforas y descripciones visuales intensas que reflejan la confusión y la ansiedad del protagonista.

En el primer verso, se hace referencia a una sensación de manipulación por parte de la pareja, quien parece querer controlar al protagonista manteniéndolo cerca todo el tiempo. Esta dinámica crea un ambiente opresivo, donde el protagonista se siente atrapado e incapaz de escapar. Se destaca la dualidad entre alejarse físicamente pero seguir siendo consumido emocionalmente por la relación.

A medida que avanza la canción, se profundiza en la desconexión emocional entre los dos personajes, donde hay una lucha interna por comprenderse mutuamente. Las preguntas sin respuesta y la incapacidad para comunicarse efectivamente generan un sentimiento de frustración y soledad en el protagonista. El tic tac constante del reloj simboliza el paso del tiempo y la inminencia de tomar decisiones importantes respecto a la relación.

La repetición de las frases "a volar, a reír, a llorar" sugiere un ciclo continuo de altibajos emocionales dentro de la dinámica relacional. La sensación de cansancio y desgaste emocional es palpable en las letras, reflejando un agotamiento tanto físico como emocional debido a los conflictos constantes.

En cuanto a la estructura musical, se puede apreciar una combinación única de elementos sonoros que complementan la narrativa lírica. La instrumentación apoya el tono melódico y emotivo de la canción, creando una atmósfera densa y reflexiva. La voz ronca del cantante añade una capa adicional de intensidad emocional a cada verso, potenciando el impacto emotivo de la letra.

En conclusión, "Con un latido del reloj" es mucho más que una simple canción: es un viaje profundo hacia las complejidades del amor y las relaciones humanas. A través de imágenes vívidas y metáforas evocadoras, Extremoduro logra capturar la esencia misma del conflicto interno experimentado en las relaciones complicadas. Cada nota musical sirve como vehículo para transmitir las emociones crudas y sinceras contenidas en esta poderosa composición.

Ya sé qué quieres. Ya sé qué intentas:
tenerme todo el día metido en tu despensa.
Dime: quién eres? Qué te atormenta?.
Te doy todo mi esperma, y no sé si te alimenta.
Salgo de casa muy despacito,
y por las noches me vuelvo loco;
doy media vuelta, y no necesito
estar tan cerca de ti.

Me quedé sentado en la parte de atrás,
medio desquiciado. Me hiciste entrar,
y me quedo en el pasillo...
Hay gato encerrado en tu forma de hablar;
alguien nos estorba, y yo quiero saber quién es.
Quién es?. Quién es?!!.

Abro la puerta, y soy yo también quien entra.
Me gustaría poder salir fuera de mí...
Hago preguntas que nadie me contesta,
y a medianoche, mi corazón empieza a latir. Tac, tic, tac...
Nos tocamos con cuidado, nos hicimos esperar,
sin saber qué hacer: no hace falta hablar.
Nos cogimos de la mano, nos echamos a volar,
y a la vez reír, y a la vez llorar.

Me siento tan cansado... Suena el timbre otra vez;
cuando estás a mi lado, no quiero saber quién es.
Desconectado, y no sé por qué, y tampoco entiendo
que ya no sales en mis sueños.
Como un reloj, te tengo en la cabeza a todas horas;
compréndelo, que tenga miedo a estar contigo a solas.
Te alejaste demasiado, nos dejamos de mirar,
y a la vez reír, y a la vez llorar.
Y cada uno por su lado, nos echamos a volar,
y a la vez reír, y a la vez llorar.