A la piramide del sol de Fernando Delgadillo

La letra de la canción "A la Piramide del Sol" de Fernando Delgadillo es poética y profunda, evocando imágenes de antigüedad y reflexiones sobre el paso del tiempo. La canción parece estar dirigida a la pirámide del Sol en Teotihuacán, un sitio arqueológico en México con gran importancia histórica y cultural.

En las primeras estrofas, se menciona la inagotable estela de aquel que siempre ha sido camino, haciendo alusión a la grandeza y perdurabilidad de esta estructura ancestral. Se destaca su templanza y fresca sobriedad, así como la nostalgia que envuelve su presencia. Las descripciones detalladas de los muros ancestrales y polvosos sugieren una conexión profunda con el pasado y sus historias susurradas en la tranquilidad nocturna.

La referencia a los secretos del silencio y los suspiros del perpetuo parece sugerir una solemne comunicación con las épocas pasadas, como si la pirámide fuera testigo de incontables relatos olvidados por el brillo superficial y moderno. La invocación al coloso viejo y triste para convertirse en la flor del verso añade una capa de simbolismo lírico al anhelo de preservar la memoria y honrar la historia enterrada en piedra.

Al hablar del tiempo descendiendo cantando e arrancando las lunas al sol de epopeyas, se evoca un sentido épico y mitológico que eleva el monumento a una dimensión casi divina. La idea de sembrar maíz en semillas refuerza esta imagen creativa y fértil, ligando proezas al cinto celeste e incluso mencionando elementos como vida, muerte o peste para ilustrar un ciclo eterno de transformaciones.

La canción logra conjugar lo tangible con lo intangible, lo terrenal con lo espiritual, tejiendo un tapiz lírico rico en metáforas e imágenes evocadoras. El manejo cuidadoso del lenguaje crea una sensación envolvente que transporta al oyente a través del tiempo hacia un lugar donde historia, memoria e imaginación se entrelazan en una danza poética.

En este contexto, comparaciones con otras obras musicales o artísticas que aborden temas similares podrían ser útiles para ampliar el entendimiento sobre cómo diferentes artistas exploran conceptos como tiempo, memoria o legado cultural a través de sus creaciones. En particular, analizar cómo figuras contemporáneas abordan la relación entre pasado y presente podría agregar profundidad al análisis contextual de esta canción tan rica en simbolismo histórico.

Con la estela inagotable
de aquel que siempre ha sido camino,
tu templanza quien supiera
buscarla en la lontananza vibrante de humedad
si bien ha pasado el hombre
se ha quedado el tiempo en el recuerdo
que va enredando los hechos con tu faz
no me fueras más remota
si antecedes las memorias de tu edad.
Con la fresca sobriedad de antaño
y reflexión del alma
tu pesado pesar de roca
se ha jurado nostalgia años atrás
con tanto ayer en tus tapias
ancestrales y polvosas
que de noche cuentan murmullos a la paz
cuando el campo está en silencio
tu lamento lleva el viento adonde va.
'di coloso viejo y triste
los secretos del silencio
cuando el viento lleva eterno
los suspiros del perpetuo
condenado a soledades
cuando busca entre tus quicios
hoy vacíos y destierros
y olvidados por condena de lo reluciente y nuevo
yo te invoco y tu pasado
a ser la flor de mi verso
por la noche y la tiniebla,
por la estrella y el sendero'.
Fue cuando el tiempo
bajara cantando
y rasgando las lunas
al sol de epopeyas
y arrojó leyendas
como si sembrara
maíz en semillas y
etapas en eras
ligando proezas
al cinto celeste
de muerte a la vida
de alivio a las pestes,
tú viste al hombre
tu viste la muerte
miraste al tiempo de cinto celeste,