La canción "Afterthought", interpretada por Joji y colaborando con BENEE, se enmarca dentro del álbum "Nectar", lanzado en septiembre de 2020. Esta pieza musical es una exploración emotiva que fusiona el R&B alternativo con matices de pop, característica del estilo distintivo de Joji. Las letras reflejan un desgarro interno y una vulnerabilidad que resuena profundamente con muchos oyentes.
Desde el inicio, la letra sumerge al oyente en una atmósfera melancólica donde el protagonista parece reflexionar sobre las experiencias pasadas y las conexiones fallidas. A lo largo de la canción, se puede escuchar un subtexto que habla sobre la lucha interna entre los deseos románticos y el miedo al compromiso. La voz suave y melódica de Joji, acompañada por la tonalidad dulce de BENEE, crea un contraste que intensifica esta sensación de añoranza.
El protagonista está atrapado en un ciclo de pensamientos después de perder a alguien importante. El uso del término "afterthought" sugiere que hay un peso emocional asociado a la memoria; recordamos a esa persona no solo por lo que fue, sino por lo que pudo ser si las circunstancias hubieran sido diferentes. Esta retrospección tiene una profunda carga emocional: evoca sentimientos de tristeza y arrepentimiento mientras se aceptan las limitaciones impuestas por uno mismo o las decisiones equivocadas.
Un análisis más detallado revela ironías ocultas en algunos versos. El protagonismo aquí muestra cómo a menudo llevamos nuestras inseguridades a las relaciones, proyectando nuestros miedos sobre quienes amamos. Este proceso puede llevar a situaciones donde nos sentimos solos incluso estando acompañados. A través de giros líricos característicos, Joji transforma sus inseguridades personales en universales; es decir, convierte su dolor individual en una experiencia compartida por todos aquellos que han sentido amor perdido o inalcanzable.
Los temas centrales giran en torno al amor no correspondido y la lucha con la identidad personal frente a las expectativas sociales. Al establecer estos motivos recurrentes, el artista invita al oyente a cuestionarse sus propias relaciones e interacciones emocionales. En este sentido, "Afterthought" no es solo un lamento melódico; es también una búsqueda introspectiva donde cada verso ofrece un nuevo nivel de entendimiento personal.
El tono emocional se manifiesta principalmente desde la primera persona, proporcionando una visión íntima que permite sentir cada latido del corazón desgarrado del protagonista. Este enfoque subjetivo hace que el público empatice fácilmente con su historia; unos minutos son suficientes para trasladarnos a nuestra propia narrativa de pérdida o anhelo.
Al comparar esta canción con otras composiciones dentro del mismo álbum "Nectar", se evidencia cómo Joji ha establecido una temática continuada sobre el anhelo y la introspección emocional. Mientras que algunas canciones pueden ser más crudas o directas acerca del dolor amoroso, "Afterthought" lo presenta con sutileza y belleza poética.
En cuanto al contexto cultural en el cual se lanzó esta pieza musical, los tiempos post-pandemia han traído consigo reflexiones más profundas acerca del aislamiento emocional y físico vivido durante esos períodos inciertos. La música contemporánea ha claudicado ante esos nuevos sentimientos intensos generados por el distanciamiento social; así encajaría perfectamente "Afterthought", resonando entre aquellos que encontraron consuelo en expresiones artísticas durante momentos difíciles.
El éxito comercial e impulsos creativos adicionales detrás de este tipo de obras demuestran cómo artistas como Joji capturan exactamente aquello por lo cual muchos anhelan expresar pero luchan para verbalizar: aquellos sentimientos complejos asociados con el amor moderno. Sin lugar a dudas, esta colaboración entre Joji y BENEE prevalece como una clara representación poética e introspectiva que invita continuamente al oyente a experimentar ese viaje emocional cargado tanto de melancolía como esperanza.