La canción "Corren los chetos y putos" de El Perro es un tema que se enmarca dentro del género de la cumbia villera, una variante de la cumbia popular en Argentina que suele abordar temáticas de la vida urbana, problemas sociales y el día a día en los barrios humildes. La cumbia villera, conocida por sus letras pintorescas y muchas veces polémicas, nació a finales de los años 90 y ha sido parte integral del repertorio musical en varios sectores del Cono Sur.
Analizar las letras de esta canción requiere prestar atención tanto al lenguaje como al contexto cultural en el que fue creada. Desde el inicio, "tomá el palo si sos un (insulto)" establece un tono desafiante y excluyente. Aquí se puede ver la demarcación entre distintos grupos sociales; en este caso, El Perro parece estar poniendo una línea divisoria entre su audiencia principal —los seguidores de la cumbia— y aquellos considerados fuera de esta comunidad, específicamente los "chetos" (personas pertenecientes a clases altas o medias con actitudes pretenciosas) y aquellos identificados con otros géneros musicales como el electro.
El estribillo "ii corren, ke korren, ke korren/ke korren los chetos" refleja una ruptura clara entre dos mundos que rara vez se tocan: el mundo popular de la cumbia villera frente al más elitista. Además del uso explícito del insulto a quienes escuchan música electro ("putos que bailan electro"), hay un fuerte mensaje beligerante que refuerza la identidad comunitaria contra lo considerado externo.
El uso recurrente del término "que sarpen los gatos" implica un llamado directo a no permitir intrusiones o confrontaciones sin respuesta; advierte sobre las consecuencias para quienes intenten traspasar estos límites culturales introspectivos. La frase final "ii si estás perseguido comprate un perro" resuena con humor e ironía callejera típica del género villero; sugiere un consejo para mantenerse protegido ante cualquier sensación de peligro o amenaza externa.
Desde una perspectiva emocional e integrada socialmente dentro del colectivo urbano joven argentino que abraza esta subcultura musical como plataforma identitaria -simboliza resistencia cultural-, encontramos además razones estructurales profundas relacionadas directamente hacia modelos económicamente desiguales presentes particularmente fuertes dentro sociedades urbanísticamente segregadas Latinoamérica operando bajo este marco contextual sociológico-.
Musicalmente hablando melodías inherentes tradicionales Cumbia alturas vocales rasposas instrumentales caracterizan pieza percusivamente rítmica acentuadamente marcas texturas definidas líneas graves utilizan fusionado arreglos electrónicos techos generacionales similares recontextualización estética contemporánea resultando poderoso vehículo expresivo similar empaques canciones referenciales artistas tal Marlon anteriormente elevado estilos manera resonancia amplificada subculturas prexistentes cercanía ideología originalidades ciertas fricciones inherentes colisión mundos ambientales continua circulación música locales barriales fiestas celebraciones entorno vecinal permanente presente vibrante tácita transiciones influencias absorbidas ambientes juveniles naturales expansión.
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