Child come away de Kim Wilde

La canción "Child come away" interpretada por Kim Wilde, escrita por Ricky & Marty Wilde, es una poderosa narrativa que aborda un tema oscuro y conmovedor. A lo largo de la letra, se narra la historia de una joven cuya vida se ve truncada en circunstancias misteriosas y perturbadoras. La canción comienza con un llamado a la infancia y a la inocencia perdida, invitando al niño a alejarse mientras describe a una niña caminando junto al ayudante del sheriff. Este primer verso establece el tono inquietante y sombrío que envuelve toda la canción.

La historia se desarrolla con detalles escalofriantes sobre el hallazgo de esta chica en la playa, aparentemente sin vida y con signos de violencia. Se mencionan marcas en la arena y un mensaje intrigante que dice "she is mine", lo cual añade un elemento siniestro y desconcertante a la narrativa. A medida que avanza el relato, se revela el impacto devastador que este incidente ha tenido en la comunidad local. La chica, antes llena de vida y felicidad, ahora es objeto de especulación y rumores sobre su desafortunado destino.

La letra sugiere un clima de miedo e incertidumbre entre los habitantes del pueblo, marcado por el silencio ominoso que rodea el caso. Incluso ante las autoridades judiciales, parece haber reticencia en abordar completamente lo sucedido, lo que refuerza la sensación de secreto y conspiración en torno al trágico evento. El hecho de que la chica sea vista siendo conducida fuera del pueblo con marcas desconocidas en su rostro agrega un giro inquietante a la historia, dejando abiertas preguntas sobre su destino final.

En términos de significado más profundo, "Child come away" puede ser interpretada como una reflexión sobre el lado oscuro e impredecible de la humanidad. La canción pone énfasis en cómo la inocencia puede ser vulnerada por fuerzas malévolas y cómo incluso los entornos supuestamente seguros pueden albergar peligros ocultos. Además, destaca cómo las acciones violentas afectan no solo a las víctimas directas sino también a toda una comunidad, generando miedo y desconfianza entre sus miembros.

Este tema tan cargado emocionalmente se complejiza aún más si consideramos el contexto histórico y social de los años 80, período en el cual surgió esta canción. La década estuvo marcada por tensiones sociales significativas relacionadas con temas como violencia doméstica o crímenes violentos contra mujeres y jóvenes; elementos que pueden haber influenciado tanto la composición como la recepción de "Child come away".

En conclusión, "Child come away" es mucho más que una simple melodía: es una ventana a realidades oscuras e inquietantes que invitan a reflexionar sobre nuestra propia vulnerabilidad frente al mal. A través de su narrativa intensa y emotiva, Kim Wilde logra capturar no solo nuestra atención auditiva sino también nuestro sentido más profundo de empatía hacia aquellos cuyas vidas son marcadas por tragedias inexplicables.