Maldita Costumbre de Morat

La canción "Maldita Costumbre" de Morat, extraída del álbum "Balas Perdidas (Versión Especial)", es una potente expresión de desamor y resignación que retrata la lucha interna del protagonista tras repetidos desencuentros sentimentales. Publicada en octubre de 2018, esta pieza refleja el estilo característico de la banda colombiana, marcado por melodías pegajosas y letras sinceras que conectan con las emociones del oyente.

La letra pone de manifiesto los estragos emocionales causados por una relación marcada por idas y venidas. Desde los primeros versos, se nota cómo el protagonista se siente arrastrado hacia un amor destructivo. "Nunca supe hacerle caso a mis instintos" revela esa incapacidad de escuchar su propia voz interior ante el amor que lo consume. Este sentimiento se acentúa con la imagen de un corazón robado como si fuera un dulce, sugiriendo cómo la persona amada sedujo al protagonista sin compasión ni advertencias.

A lo largo de la canción —de forma recurrente— aparece la frase “maldita costumbre”, evocando no solo frustración, sino también nostalgia. Se percibe una ironía sutil en este empeño casi masoquista por volver a experimentar ese amor doloroso. El uso de términos como “siete vidas” hace alusión a la idea popular sobre las oportunidades perdidas o malgastadas; cada partida deja al protagonista con menos posibilidades frente a un futuro incierto donde las secuelas emocionales persisten.

El tono emocional destila melancolía, dominado por el sabor agridulce del recordar momentos felices seguidos de despedidas desgarradoras. Con cada paso que da su amada hacia atrás, reitera el sufrimiento infligido cada vez que regresa y luego se va nuevamente: “Y quien sabe cómo se acabará este mes”. Este final ambiguo genera tensión en el oyente, retándole a preguntarse si habrá alguna resolución.

Los laberintos y vueltas mencionados simbolizan la complejidad emocional inherente a ciertas relaciones románticas. A pesar de reconocer que “del amor siempre he escuchado cuentos tan distintos”, el protagonista admite haber encontrado en esta conexión algo original, lo cual despierta una mezcla entre admiración y dolor. La repetición constante del abandono resalta lo dañino que puede ser aferrarse a alguien aunque sea consciente del inevitable resultado.

En términos contextuales, "Maldita Costumbre" resonó con muchas personas al ser lanzada en una época marcada por la rápida evolución del romance contemporáneo; un momento donde muchos experimentan relaciones fugaces volviendo al mismo patrón perjudicial sin poder desprenderse completamente. Esto puede reforzar las creencias populares sobre el amor tóxico transmitido generacionalmente.

Morat ha logrado acaparar la atención no sólo con esta canción sino también con otras obras donde exploran temas similares como desamor y auto-reflexión. En comparación con otros sencillos como "Cómo te atreves", "Maldita Costumbre" refleja una evolución más profunda desde los inicios inseguros hasta asumir plenamente los sentimientos tormentosos e intrincados asociados al amor no correspondido.

Por último, "Maldita Costumbre" nos invita a reflexionar sobre nuestras propias experiencias románticas mientras danzamos entre lo nostálgico y lo liberador. Su lirismo nos enseña que incluso entre corazones fracturados hay belleza en reconocer nuestros propios ciclos destructivos para así encontrar el camino hacia adelante. Esta capacidad para resonar emocionalmente es parte integral del atractivo duradero de Morat como banda emergente en la escena musical hispanohablante hoy día.