En Marcha de Rubén Pozo

La canción "En Marcha" interpretada por Rubén Pozo nos sumerge en un viaje emocional a través de sus letras cargadas de desesperanza, introspección y lucha interna. El artista parece desgarrarse al arrancarse el corazón, simbolizando posiblemente un acto de autodestrucción o separación emocional. La urgencia en su voz al preguntar por qué esperar a que termine el verano para hacerlo sugiere una impaciencia por resolver una situación dolorosa de inmediato.

El uso del nombre "Ihon" como símbolo de alguien desilusionado y desconectado con la ilusión puede reflejar la falta de esperanza y la sensación de vacío que experimenta el narrador. La sensación de estar atrapado en una habitación que devora emocionalmente al protagonista refleja la angustia y claustrofobia que siente, mostrando signos claros de depresión y dependencia emocional.

La metáfora de mirar el celular y no llamar sugiere un distanciamiento con la realidad y las conexiones interpersonales, destacando una desconexión social presente en la vida contemporánea. La referencia a no escribir si "tu" (posible persona amada) no está presente muestra cómo esa ausencia afecta profundamente su creatividad y bienestar emocional.

Rubén Pozo utiliza referencias a trenes pasando, bohemia contra realidad, y calidad sobre cantidad para expresar su búsqueda interna de significado y autenticidad en un mundo lleno de distracciones e ilusiones superficiales. El mencionado "Galf" representa quizás a pocos sobrevivientes que resisten ante las adversidades, mientras que el recurso al rap como salvavidas personal subraya el poder sanador y terapéutico del arte.

La aparición final del término "Cheb Rubén" junto con referencias a oscuridad, sentimientos compartidos y exclusividad apunta hacia un nivel más profundo de conexión humana basada en la empatía, la vulnerabilidad compartida y la experiencia única e intransferible. Asimismo, la mención del estudio Soul Level Studio probablemente sea donde se gestó esta pieza musical tan íntima e introspectiva.

En comparación con otras obras del artista dentro del grupo Pereza o en solitario, "En Marcha" se destaca por su vulnerabilidad sin filtros y por abordar temas universales como la soledad, el dolor emocional y la búsqueda espiritual. La canción transmite una energía cruda y sinceridad que conecta directamente con el oyente, invitándolo a reflexionar sobre sus propias luchas internas y experiencias personales.

A través de sus letras poéticas e impactantes, Rubén Pozo logra transmitir un mensaje potente e íntimo sobre la batalla contra los propios demonios internos, instando a confrontar los momentos oscuros con valentía y autenticidad. Su habilidad para fusionar emoción pura con reflexiones filosóficas da forma a una canción que resuena en lo más profundo del ser humano moderno en busca de respuestas existenciales en un mundo caótico e incierto.