El Vals del Adiós (con Bunbury) de Rulo Y La Contrabanda

La letra de la canción "El Vals del Adiós" interpretada por Rulo y la Contrabanda en colaboración con Bunbury es una emotiva despedida impregnada de melancolía y resignación. En ella, el protagonista expresa su decisión de partir, reconociendo que no es la mejor opción para la persona a la que se despide. A pesar de ello, prefiere marcharse sin ver los ojos de su amante al decir adiós, buscando su propia felicidad en otro lugar.

El tema de la huida ante las situaciones difíciles se hace presente en la canción, con versos que hablan sobre escapar cuando hay tormenta y asumir la derrota como algo habitual. La metáfora del "traje de cobarde" nos muestra al protagonista reconociendo sus propias debilidades y eligiendo un camino que le permita mantenerse a salvo emocionalmente.

En medio de esta despedida, el personaje rememora momentos nostálgicos de alegría y diversión, especialmente relacionados con la música rock and roll. Las noches llenas de sonrisas, acompañadas por esa mezcla característica del género musical, parecen representar un escape temporal a la realidad más dura que enfrenta.

La imagen del vals como baile tradicional utilizado para decir adiós añade un matiz poético a la canción. Aunque el narrador acepta su partida y deja atrás cenizas del pasado, también reconoce el valor sentimental de esos recuerdos compartidos.

En cuanto a comparaciones relevantes, se podría establecer un paralelismo entre "El Vals del Adiós" y otras canciones que exploran temáticas similares dentro del repertorio tanto de Rulo y la Contrabanda como de Bunbury. Estos artistas han abordado en diversas ocasiones las complejidades emocionales humanas a través de sus letras profundas y evocadoras.

Uno dato curioso sobre esta colaboración es que Bunbury (nombre artístico de Enrique Bunbury) es conocido por su versatilidad musical y capacidad para adaptarse a diferentes estilos, lo cual complementa perfectamente el tono melódico rociero característico de Rulo y la Contrabanda en esta canción.

En resumen, "El Vals del Adiós" destaca por su lírica cargada de emotividad y reflexión sobre el acto finalizador de partir. A través de sus versos nostálgicos, invita al oyente a sumergirse en ese proceso inevitable pero necesario para seguir adelante.

Me voy pero no llores, tu no estés triste
Me largo porque no soy tu mejor opción
prefiero no ver tus ojos al despedirme
y a ser feliz en otra canción.

Huir fue mi costumbre cuando hay tormenta,
mi traje de cobarde me sienta bien
que pronto se hizo tarde pido la cuenta
dos besos de propina y hasta otra vez.

Y brindo por esas noches donde todo era alegría
esa mezcla de sonrisas y rock and roll
Esas tardes de verano apurándonos los cuerpos
valía mas el bar de abajo que toda nueva york.

Me voy cantando el vals del adiós...

Acepto la derrota como costumbre
asumo tu destierro o solución
ya no arde la madera no queda lumbre
cenizas de un pasado que ya pasó.

Y brindo por esas noches donde todo era alegría
esa mezcla de sonrisas y rock and roll
Esas tardes de verano apurándonos los cuerpos
valía mas el bar de abajo que toda nueva york.

Me voy cantando el vals del adiós...