Flesh de Aerosmith

La canción "Flesh" interpretada por Aerosmith pertenece al álbum "Get A Grip" y se sitúa en el género del rock, específicamente en el subgénero de hard rock, característico de la banda. La letra de la canción habla sobre el deseo y la pasión, describiendo cómo el corazón late rápido y se siente una anticipación cuando llega el momento de encontrarse con la persona amada.

A lo largo de la canción, se mencionan referencias a diversos lugares como San Antone y Marrakesh, creando un ambiente global para transmitir la universalidad del deseo humano. Se establece un paralelismo entre figuras históricas como Adán y Eva, Romeo y Julieta, sugiriendo que a lo largo de la historia, el componente carnal ha sido esencial en las relaciones humanas.

La letra también hace alusiones a elementos como el príncipe de la lujuria enfrentándose a su igual femenina en forma de bruja. Esta dualidad entre fuerzas opuestas resalta la intensidad del deseo humano representado por la carne. Se habla del amor a través de los tiempos, desde épocas antiguas hasta los tiempos modernos, destacando que independientemente del contexto temporal, todos buscan esa conexión física.

El título mismo de la canción, "Flesh", destaca la importancia que se le da al cuerpo y a las sensaciones físicas dentro del tema abordado. Se refleja una fascinación con lo corpóreo y tangible en contraste con lo abstracto o intangible.

Un dato interesante es que Aerosmith grabó "Flesh" como parte de su exitoso disco "Get A Grip", lanzado en 1993. La potente voz líder de Steven Tyler se combina con riffs abrasadores de guitarra para crear una atmósfera intensa y llena de energía característica de la banda.

En comparación con otras obras del grupo, "Flesh" sigue explorando temáticas recurrentes en su música como el amor, el deseo y las experiencias humanas intensas. Aerosmith ha sido reconocido por combinar letras poéticas con poderosos acordes rockeros que resonaron con audiencias en todo el mundo.

En conclusión, "Flesh" es una canción que aborda el tema universal del deseo físico y emocional entre seres humanos a lo largo del tiempo. Con metáforas evocadoras e intensidad musical, Aerosmith logra capturar la esencia atemporal de esta experiencia humana fundamental.