Kinou no mirai de Kurumi Enomoto

La canción "Kinou no mirai" interpretada por Kurumi Enomoto es una poderosa exploración de los sentimientos y las experiencias humanas a lo largo del tiempo. Las letras parecen reflexionar sobre eventos pasados, sueños que se han cumplido o quedaron sin realizarse, verdades reveladas y mentiras contadas. Se explora la dualidad de emociones como amar y odiar algo al mismo tiempo, querer crear una canción pero no lograr hacerlo, esperar algo sin saber si se cumplirá.

El protagonista de la canción se cuestiona si su presente está conectado al pasado o si simplemente se convierte en historia una vez más. La falta de creencia en esta conexión le parece interesante, lo cual añade un matiz de misterio a sus pensamientos. A pesar de este escepticismo, sigue cantando cada día, sugiriendo que la música es su forma de expresión más sincera.

Se menciona el deseo imposible de conceder algo olvidado y la dificultad para olvidarlo. El protagonista admite desconocer ciertas cosas pero también reconoce que ha aprendido otras. Este contraste entre ignorancia intencionada y conocimiento adquirido revela un proceso interno complejo en el protagonista.

A medida que avanza la canción, el tono se vuelve un tanto melancólico al aceptar que algunos deseos no pueden cumplirse y que hay tristeza en esa verdad. La idea de mirar hacia el futuro como una forma de transformar el presente resurge con fuerza, haciendo énfasis en la importancia del momento actual ante la ausencia de alguien querido.

La conclusión destaca la idea de que el pasado se transforma en presente, con todo lo ocurrido hasta ahora influenciando lo que está por venir. Se presenta el futuro como algo incierto pero único en su creación personal. El ciclo emocional de amar y odiar algo sin cambiarlo nunca, expresándolo tarde pero sintiéndolo profundamente cuando ya no está presente.

La convergencia entre pasado y futuro se visualiza como una oportunidad para seguir adelante con valentía hacia lo desconocido e incierto. La importancia del presente como constructor exclusivo del futuro queda patente en las palabras del protagonista al afirmar que "hoy es mi única oportunidad para crear mi futuro".

En resumen, "Kinou no mirai" es una pieza musical introspectiva que examina la relación entre pasado, presente y futuro desde una perspectiva emotiva y reflexiva. Kurumi Enomoto logra transmitir sentimientos complejos a través de sus letras cargadas de significado e invita al oyente a contemplar sus propias experiencias temporales con sensibilidad y autenticidad.

Este single fue publicado el 11 diciembre 2011 sin ninguna nominación o premio destacable registrado públicamente.