El olvido de Pablo Alborán

La canción "El olvido" de Pablo Alborán, incluida en su álbum "Terral", es una emotiva balada que explora la desintegración de una relación romántica. El género pop impregna este tema con una melodía emotiva y la voz de Alborán que transmite una profunda melancolía y resignación.

Desde el primer verso, "Se acabó, no estarás en mis brazos", la canción establece un tono finalista e irrevocable. La repetición de la frase "se acabó" al comienzo de varios versos subraya la inevitabilidad del fin de la relación. Esta insistencia se transforma en un mantra doloroso, reflejando el proceso interno del cantante que asimila la ruptura.

A medida que avanza, Alborán describe los elementos físicos y emocionales que han desaparecido con el término de su relación: flores, vino en el balcón y el consuelo previo aportado por sus canciones. Estos símbolos cotidianos intensifican el vacío dejado por esta despedida amorosa.

Las letras también exploran la falta de compatibilidad entre ambos amantes: “No, quizás no sea tu media naranja”. Aquí, Alborán reconoce que tal vez nunca fueron adecuados el uno para el otro, tocando así temas universales sobre las diferencias irreconciliables entre dos personas. Esta reflexión personal añade profundidad emocional a la letra.

Un elemento significativo es cómo aborda la lucha interna al decidir dejarlo antes de ser consumido por el olvido: “Saldré antes que llegue el olvido”. Este mensaje es particularmente poderoso porque refleja una decisión activa; incluso ante un dolor inevitable, opta por conservar parte de sí mismo intacto antes de desvanecerse completamente en los recuerdos neutrales del pasado.

Otro aspecto interesante es cómo menciona abiertamente las heridas abiertas por su pareja: “No voy a fingir que aún te quiero a morir cuando acabas de abrir mis heridas.” Con honestidad brutal aborda las realidades crudas del amor donde muchas veces nos aferramos mientras a su vez sufrimos daño emocional infligido por quien alguna vez amamos profundamente.

El punto más fuerte dentro del desglose lírico podría hallarse hacia casi llegando al final señalando un dualismo intrínseco presente también durante toda composición musical poesía intensa reflejando tanto pérdida cuanto esperanza simultáneamente; determinado mencionar ahora habiendo creído sin embargo aún residiendo fe amor aún después dolor viceversa dominio corazón resistente.

Musicalmente hablando Pablo incorpora armonías sencillas pero elevadas realzando sentido angustia serenándose pasajes energéticos saltos vocales emotivos característica propia estilo cantor-compositor malagueño pulcritud selección instrumentación habitualmente guitarras acústicas añadir capas profundidad convirtiendo pieza obra maestra simples acordes complejas historias humanas deleite escuchante sumisión narrativa tonal impregnada autenticidad

En resumen,"El Olvido” resulta testamento lirico explorador relaciones humanas fragilidad fortaleza decisiones dolorosas terribles necesarias avanzar partícipe compendio arte visceral palpable embriagador certificando talento indiscutible Pablo Alborán clase contemporánea autor capaz trasladarnos universos afectivos personales sin duda quedará adheridos latir perpetuo corazones quebrados buscando redención poesías melódicas alma.

Se acabó,
No estarás en mis brazos.
Se acabó,
No habrá más flores ni vino en el balcón.
Se acabó,
No hay más que furia en las miradas.
Se acabó,
No busques mi cuerpo tendido en la cama.

No, quizás no sea tu media naranja,
Ya sé que no estamos bien y que se acaba
Si esto lo das por perdido,
Me iré antes que llegue el olvido.
Saldré de este sueño prohibido,
Castigaré el tiempo que viví contigo
Si esto no tiene salida,
Más vale marcharme enseguida.
No voy a fingir que aún te quiero a morir,
Cuando acabas de abrir mis heridas.

Se acabó,
Mi canción ya no consuela este dolor.
Se acabó,
Se derrumba nuestro reino por culpa de los dos.
Se acabó,
Al menos ten la cara de afrontar que esto terminó
Busquemos salida sin miedo a matarnos
No, quizás no sea tu media naranja,
Y que si hoy me ves marchar y te alarmas.

Si esto lo das por perdido,
Me iré antes que llegue el olvido.
Saldré de este sueño prohibido,
Castigaré el tiempo que viví contigo
Si esto no tiene salida,
Más vale marcharme enseguida.
No voy a fingir que aún te quiero a morir,
Cuando acabas de abrir mis heridas.

Se acabó el sueño de un futuro para dos.
Se acabó pensar en un nosotros,
Ahora ya estoy solo y aún creo en el amor.
Aunque a veces me lastime y, quiera o no,
Domine mi duro corazón.

Si esto lo das por perdido,
Me iré antes que llegue el olvido.
Saldré de este sueño prohibido,
Castigaré el tiempo que viví contigo
Si esto no tiene salida,
Más vale marcharme enseguida.
No voy a fingir que aún te quiero a morir,
Cuando acabas de abrir mis heridas.

Se acabó