Saturno de Pablo Alboran

La canción "Saturno" de Pablo Alboran, perteneciente a su álbum #4, es una balada pop que explora temas profundos como el amor, la decepción y el perdón. En esta canción, el cantante expresa un profundo dolor por una relación pasada que ha dejado cicatrices en su corazón.

El significado de la letra de "Saturno" se puede interpretar como un lamento por un amor perdido que sigue pesando en el alma del protagonista. La letra refleja la dualidad de emociones que experimenta después de una ruptura: la tristeza por lo que fue y la frustración por no poder superarlo completamente. La referencia a Saturno, Plutón y la Luna añade una capa más simbólica al significado de la canción. Estos planetas representan diferentes fases y estados emocionales en esta historia de amor, desde los hijos no nacidos en Saturno hasta los gritos de amor en Plutón y las peticiones de perdón en la Luna.

La repetición del estribillo "Todos los besos que me imaginé, vuelven al lugar donde los vi crecer" enfatiza el proceso doloroso de recordar momentos felices con alguien que ya no está presente. El sentimiento de culpa compartida y la dificultad para perdonarse mutuamente también se hacen evidentes en versos como "Tienes la misma culpa que tengo". A través de estas letras sinceras y emotivas, Pablo Alboran logra transmitir una sensación universal de desolación después de una ruptura amorosa.

En cuanto a datos adicionales, se sabe que Pablo Alboran coescribió "Saturno" junto con otros compositores. La canción ha sido bien recibida por sus seguidores y ha ganado premios importantes en la industria musical. En comparación con otras obras del artista, "Saturno" destaca por su melancolía poética y su capacidad para conectar con las emociones más profundas del público.

En resumen, "Saturno" es una poderosa balada pop que aborda temas universales como el amor no correspondido, la culpa y el perdón. Con letras introspectivas y emotivas, Pablo Alboran nos lleva a un viaje emocional a través de los planetas simbólicos donde reside el recuerdo doloroso de un amor perdido. La canción demuestra la habilidad del cantante para comunicar sentimientos complejos con sinceridad y autenticidad, resonando con personas que han experimentado situaciones similares en sus propias vidas.

Vuelves, en cada sueño que tengo caigo de nuevo en tu red,
Sé que tarda un tiempo curarme de ti de una vez...
Tuve tantos momentos felices que olvido lo triste que fue
Darte de mi alma, lo que tú echaste a perder.

Yo no quería amarte, tú me enseñaste a odiarte.
Todos los besos que me imaginé, vuelven al lugar donde los vi crecer.
En Saturno viven los hijos que nunca tuvimos,
En Plutón aún se oyen gritos de amor.
Y en la Luna gritan a solas tu voz y mi voz,
Pidiendo perdón, cosa que nunca pudimos hacer peor.

Tienes la misma culpa que tengo,
Aunque te cueste admitir que sientes como siento
La almohada no suele mentir.

Y yo no quería amarte, tú me enseñaste a odiarte,
Todos los besos que me imaginé, vuelven al lugar donde los vi crecer.
En Saturno viven los hijos que nunca tuvimos,
En Plutón aún se oyen gritos de amor.
Y en la Luna gritan a solas tu voz y mi voz,
Pidiendo perdón, cosa que nunca pudimos hacer peor.

Gritan a solas tu voz y mi voz,
Pidiendo perdón, cosa que nunca pudimos hacer...

Cosa que nunca pudimos hacer peor.