La canción "Extra Savoir-Faire" de They Might Be Giants es una pieza musical que destaca por su estilo único y letras ingeniosas. La canción gira en torno a un protagonista que se siente superior a los demás hombres, comparándose con ellos y destacando su singularidad. Desde el principio, el protagonista señala cómo la mayoría de los hombres parecen "elfos" en comparación con él, lo que sugiere una actitud de auto admiración y confianza en sí mismo.
El tema central de la canción parece ser la exhibición de un exceso innato de encanto personal y elegancia, representado por el término francés "savoir-faire", que denota habilidad para desenvolverse con clase y estilo en situaciones diversas. El protagonista se cuestiona qué puede hacer él con todo ese exceso de encanto y aplomo, insinuando una sensación de superioridad sobre los demás en términos de estilo y carisma.
A lo largo de la canción, el protagonista desafía a aquellos que intenten copiar su estilo único, afirmando que nunca podrán igualarlo. Asegura que el tiempo demostrará su superioridad y originalidad, destacando su confianza absoluta en sí mismo. La letra sugiere una mezcla entre arrogancia y autoconciencia irónica, revelando una personalidad segura pero con tintes cómicos.
La perspectiva desde la cual se narra la canción es en primera persona, lo que sumerge al oyente directamente en la mentalidad del protagonista egocéntrico pero divertido. La combinación entre las referencias a un vocabulario español ("Inglés-English") y francés ("savoir-faire") añade un toque exótico y sofisticado a la narrativa, reforzando la idea de un personaje excéntrico e inimitable.
"They Might Be Giants" es conocido por su estilo alternativo e innovador dentro del mundo musical, destacando por sus letras ingeniosas y temas poco convencionales. La canción "Extra Savoir-Faire" se fusiona perfectamente con esta estética única del grupo, brindando al público una experiencia auditiva refrescante y desafiante.
En resumen, "Extra Savoir-Faire" es una canción que explora el concepto de superioridad estilística y personal desde una óptica humorística e irreverente. Con un tono sarcástico pero divertido, el protagonista se burla sutilmente de aquellos que intentan emular su distintivo "savoir-faire", revelando así una faceta juguetona pero segura de sí misma. Esta mezcla entre confianza excesiva e ironía hace de la canción una joya musical para aquellos amantes del ingenio lírico y lo inesperado en la música contemporánea.