La canción "Dear Abby" de Dead Kennedys es una pieza musical que aborda un tema inusual y controvertido: la alimentación de una familia a partir de carne obtenida de sus sujetos de autopsia. La letra, escrita en forma de carta a la famosa columnista "Abby", narra la historia del narrador, un forense subpagado que busca asegurarse de que su familia pueda consumir carne al menos tres veces por semana, a pesar de no poder costearla debido a los altos precios. Ante esta situación, decide llevar a casa cortes selectos procedentes de sus autopsias y mezclarlos con platos como Tuna Helper para que su familia los disfrute sin saber su verdadero origen.
El narrador expone el dilema ético y moral al que se enfrenta, revelando sus sentimientos de preocupación ante la posibilidad de ser descubierto por su astuto hijo o por el impacto emocional que podría tener en su familia si conocieran la verdad. Esta historia absurdamente macabra plantea cuestionamientos sobre la ética en situaciones extremas y la necesidad de ocultar ciertos aspectos oscuros para proteger a quienes amamos.
A través de esta letra, Dead Kennedys exploran las temáticas transgresoras y provocativas características del punk rock, desafiando normas sociales y presentando situaciones grotescas con ironía y sarcasmo. La banda utiliza el humor negro como herramienta para generar reflexión e incomodidad en el oyente, cuestionando convenciones establecidas y exponiendo hipocresías dentro de la sociedad.
En términos musicales, "Dear Abby" se inscribe dentro del género punk rock y hardcore punk característico de Dead Kennedys. Con un ritmo acelerado, guitarras distorsionadas y una voz agresiva e incisiva, la canción refleja la energía cruda y rebelde propia del punk. La estructura musical es directa y contundente, acompañando a la letra provocativa con una composición frenética que enfatiza el mensaje subversivo.
En cuanto al contexto cultural en el que se lanzó la canción en 2011, cabe destacar que Dead Kennedys ha sido una banda emblemática dentro del panorama punk rock desde los años 80, conocida por sus letras políticamente cargadas y su actitud contracultural. "Dear Abby" continúa con esa tradición contestataria e irreverente, abordando temas tabúes con un enfoque crítico y desafiante.
En resumen, "Dear Abby" es una canción que desafía límites y provoca reflexión a través de una narrativa surrealista y perturbadora. Con su estilo punk característico, Dead Kennedys logran transmitir un mensaje impactante sobre ética, secretos familiares y las contradicciones humanas en situaciones extremas. Una pieza musical que invita a cuestionar normas sociales establecidas y a contemplar las complejidades morales presentes en nuestra sociedad contemporánea.