Damien de Iced Earth

La canción "Damien" interpretada por Iced Earth, perteneciente al álbum "Horror Show", es una representación poderosa del thrash metal y el power metal. La letra de la canción transporta a los oyentes a un mundo oscuro y apocalíptico, donde se evoca la figura del Anticristo y se hace referencia a la llegada del fin de los tiempos.

La letra presenta al narrador revelando su conexión con una fuerza oscura que reside en su interior, describiéndola como una bestia. Se siente alienado de la sociedad, sintiéndose diferente de todos los demás. Asimismo, invita a aquellos que puedan comprenderlo a reconocer el número de la bestia como algo personal e íntimo.

A lo largo de la canción, se mencionan simbólicamente eventos apocalípticos y religiosos, como el ascenso del Anticristo y el conflicto final entre el bien y el mal. Se describen actos sacrílegos y blasfemos, mostrando un desafío directo hacia las creencias cristianas tradicionales.

La referencia al regreso de los judíos a Sion y al resurgimiento del Sacro Imperio Romano sugiere una visión fatalista sobre el destino de la humanidad. La llegada del Anticristo marca un momento de confrontación violenta entre los hombres que llevará a su propia autodestrucción.

En cuanto a comparaciones con otras obras musicales, Iced Earth es conocido por abordar temáticas oscuras y apocalípticas en sus letras, similar al enfoque que bandas como Iron Maiden o Black Sabbath han tomado en sus composiciones.

El contexto enmarcado por "Damien" sugiere un mensaje rebelde contra las normas establecidas y una exploración profunda de las fuerzas del mal presentes en la sociedad. La música potente acompaña magistralmente esta narrativa oscura y provocadora.

Un dato curioso sobre la canción es que toma inspiración del personaje ficticio Damien Thorn, protagonista principal de la película de terror "The Omen", que representa al hijo del diablo destinado a desencadenar eventos apocalípticos.

En conclusión, "Damien" es una pieza musical intensa que desafía convenciones e invita a reflexionar sobre temas trascendentales como el mal, el sacrificio y la batalla entre fuerzas divinas y demoníacas. Su mensaje directo y su atmósfera siniestra hacen de esta canción una experiencia sonora impactante para aquellos dispuestos a adentrarse en un universo caótico e inquietante.

So the beast resides in me
deep down i always knew
i never really did fit in
so diverse from all of you
let him who comprehends
know the number of the beast
it's a number of a man
a number just for me
As the boy becomes a man
father's minions pave the way
set in motion now, armageddon,
final conflict, end of days
I embrace the hounds of hell
and the power they oblige
for the task that lies ahead
the nazarene i'll crucify
they'll see the raptures of our kingdom
they'll see the truth to mankind
i'll show what hell truly is
the monotony of their lives

when the jews return to zion
and a comet fills the sky
the holy roman empire rises
and you and i must die
from the eternal sea he rises
creating armies on either shore
turning man against his brother
till man exists no more
Nazarene, what can you offer?
since the hour you vomited forth
from the gaping wound of a woman,
you have done nothing but drown mens' soaring desires
in a deluge of sanctimonious morality.
i was conceived of a jackal.
your pain on the cross was but a splinter
compared to the agony of my father.
i will drive deeper the thorns into your rancid carcass,
you profaner of isis.
cursed nazarene,
i will avenge thy torment.

Now disciples of the watch
see your prince of darkness rise
through famine and destruction
the four horsemen at my side
i demand a victory, i demand a sacrifice
or spend all eternity
in the flaccid gut of christ