Artificial light de The Kinks

La letra de la canción "Artificial Light" del grupo The Kinks nos sumerge en un ambiente de nostalgia y reflexión a través de la experiencia de presenciar y relacionarse con la luz artificial en un entorno nocturno. La canción captura la sensación de estar en una discoteca, rodeado por luces artificiales que iluminan a las personas con una intensidad que desdibuja las fronteras entre lo real y lo imaginario.

El narrador describe cómo, al ver a una mujer bailando lentamente bajo el resplandor de las luces artificiales, se ve confrontado por una duda inicial sobre su apariencia física. Sin embargo, esta incertidumbre se desvanece rápidamente ya que lo que realmente importa es la conexión emocional y autenticidad que ella proyecta en ese espacio iluminado artificialmente. La luz artificial actúa como un velo o filtro que permite ver más allá de las apariencias superficiales, revelando la verdadera esencia de las personas.

A lo largo de la canción, se enfatiza la idea de ser uno mismo y mostrar sin tapujos quiénes somos realmente. Se exalta la idea de no necesitar cubrirse ni disimular nuestra verdadera naturaleza, sino más bien exhibirla con orgullo ante los demás. Esta actitud despreocupada y auténtica se contrapone al mundo exterior diurno donde muchas veces nos vemos obligados a interpretar roles o actuar conforme a normas sociales preestablecidas.

La luz artificial simboliza entonces un espacio seguro y liberador donde se puede explorar la propia identidad sin miedos ni prejuicios. Es un refugio donde cada individuo puede expresarse sin temor al juicio ajeno. A través del contraste entre la luz artificial y la luz natural, se plantea la dicotomía entre la apariencia pública y privada, entre el yo socialmente aceptado y el yo íntimo y verdadero.

En síntesis, "Artificial Light" es una canción que invita a cuestionar los límites entre realidad y ficción, entre lo genuino y lo fabricado. Nos impulsa a buscar espacios donde podamos ser fieles a nosotros mismos sin máscaras ni artificios, celebrando nuestra autenticidad en medio de un mundo lleno de luces artificiales que distorsionan nuestra percepción del ser humano.